La empresa quiere convertirse en el primer grupo español y gestionar 500 apartamentos corporativos en alquiler. La firma busca ahora recursos para dar el salto a Madrid.
Operar quinientos apartamentos en tres años para alquiler corporativo. Este es el objetivo de Caterina Corporate House que prepara una ampliación de capital para dar entrada a nuevos socios y facilitar así su expansión. Entre sus planes más inmediatos se encuentra establecerse en Madrid, donde acaba de firmar sus primeros apartamentos y aspira a crecer con fuerza.
“Nos interesan apartamentos de una o dos habitaciones situados en fincas de calidad y a poca distancia de grandes centros de trabajo”, explica Manuel Vidal-Quadras, consejero delegado de la empresa, a EjePrime.
Con sede en Barcelona, Caterina Corporate House se ha propuesto acelerar la profesionalización de la actividad en España y convertirse en el primer operador de un sector que está muy atomizado. “En Europa es una modalidad de alojamiento más extendida y que se volara más que en España”, sostiene Vidal-Quadras.
La empresa gestiona actualmente cincuenta unidades en varios bloques en Barcelona, con una ocupación media del 80%, aunque aspira a alcanzar las quinientas unidades en tres años. Los planes de la compañía pasan por tener el 80% de los apartamentos localizados en Madrid y el 20% restante en Barcelona.
Fundada hace dos años, los principales accionistas de Caterina Corporate House son, además de Vidal-Quadras, los también directivos de la empresa Mafe Díaz y Pablo Viladomiu. Ahora darán entrada en su capital a un family office que les aportará fondos para acelerar su crecimiento. “Ofrecemos un producto estandarizado con unos servicios de calidad”, explica el consejero delegado de la empresa.
Caterina Corporate House aspira a tener el 80% de su cartera de apartamentos en Madrid y el restante 20% en Barcelona
La empresa negocia actualmente con socimis y propietarios de edificios en alquiler la gestión de sus apartamentos. “El alquiler corporativo tiene menos riesgos que el tradicional y, además, ofrece una rentabilidad mayor, del 5% de media”, explica Vidal-Quadras.
Con una duración mínima de 32 días, los contratos de alquiler con empresas tienen menos riesgo de impago y un menor desgaste del activo, además de ofrecer una mayor liquidez a la vivienda y una mayor flexibilidad ante cambios normativos.